Thursday, May 24, 2018

Las dos fuerzas que nos controlan: El placer y el dolor.

Solía pensar que el cambio era complicado; a veces, hasta imposible (sé que muchos piensan igual). 

Por lo mismo, decidí hacer algo al respecto. Me empecé a educar sobre cómo es que nuestro cerebro funciona para tomar decisiones.  Lo que encontré fue fascinante.  Lo fundamental y lo que hoy me gustaría compartir con ustedes es que existen dos fuerzas que nos controlan.  Estas son:  el deseo de obtener placer y evitar el dolor (o sufrimiento). 

Tradicionalmente el placer lo relacionamos con satisfacción o el bien.  El dolor, por otro lado, tiende a ser asociado con malestar o inclusive al miedo.

Mientras leía los ejemplos de cómo es que estas fuerzas funcionan, no podía evitar aplicarlos a mi propia vida y recordar cuáles fueron los sentimientos (ahora fuerzas) que me llevaron a tomar aquellas decisiones. 

De esta forma, me percaté que existen ciertas creencias dentro mío que asocio al dolor y otras al placer. Y en base a eso, tomo mis decisiones.  La influencia es real y estas dos energías existen, actuando como fuentes regidoras. 

Entonces, por ejemplo, si alguien me pregunta si me gustaría ir a probar parapente y yo asocio esta actividad al miedo, mi respuesta será un automático "no" ya que, para mí, esto equivaldría a dolor = sufrimiento. Por el contrario, bajo el mismo ejemplo, si tengo ligado un sentimiento de aventura y asocio el goce a este tipo de actividades, mi respuesta será un sólido "sí". Viéndolo así, aceptar que mi decisión fue hecha por una mera asociación en mi sistema nervioso resulta algo perturbador.  

Créanlo, esta simple evaluación puede ser aplicada a cada toma de decisión.   Sin duda, factores como creencias, estados de ánimo, valores y necesidades que debemos satisfacer, también impactan nuestras decisiones y comportamientos.  Sin embargo, desde una perspectiva existencial, la decisión estará basada, primordialmente, en saber si el resultado que asociamos a la experiencia será uno que conlleva a dolor o placer. 

La buena noticia es que esto tiene una razón de ser clara y simple y una vez que somos conscientes de la misma y sabemos que hacer al respecto, la vida cambia para mejor en un instante.  

Una vez digerido esto, internalicé que yo también he sido un esclavo de mi propia mente = consciente + inconsciente.  De esta forma comprendí que mi libertad (en su significado más auténtico) ha sido limitada por este fenómeno.  

Reconociendo este hecho, y deseando más que nada volver a mi identidad innata de auto expresión y control como ser humano (lo que soy y para que lo que Dios me regalo vida) me ordeno a adoptar nuevas creencias ya mismo con absoluta seguridad y certidumbre, y establecer lo siguiente. 

La vida cambia cuando sé que: 
  • Gozo de poder de decisión.
  • Para transformarme a mí mismo y al mundo que me rodea soy capaz de controlar mis pensamientos y el proceso en el que genero los mismos. Y entiendo que para lograr esto, los rituales son fundamentales.  
  • Soy el único responsable por mi comportamiento y sentimientos.  No puedo culpar a otro por ellos.
  • El pasado no equivale el futuro.  El presente es el "aquí y ahora" y por ende, representa el momento indicado para crear lo que yo desee.

Al ser únicos, cada uno de nosotros, tenemos valores y creencias que nos forman. Por lo mismo, lo único que pretendo a través de este mensaje, es hacer una reflexión y compartirla con la intención de que les sirva. El tesoro más preciado que tenemos es nuestro tiempo y darle el debido valor a esta variable es esencial. Si realmente deseamos aprovechar la vida y todo lo hermoso que nos ofrece para vivirla a pleno, el uso adecuado del tiempo es la prioridad.

Mi propósito está definido porque tengo muy presente que este trayecto sí tiene fecha de vencimiento, y así el sentido de la vida se vuelve sencillo. Debemos usar el tiempo de la forma que aporte mayor valor y significado a nuestra vida. 

Hoy les sugiero reflexionen lo siguiente: si existe algún área de su vida (son 8) con la cual no están del todo satisfechos, no esperen más para hacer algo al respecto, aprovechen el tesoro del tiempo y creen "calidad de vida" ahora.

Les aseguro que su decisión conjuntamente con acción los llevará a una vida plena, feliz, de gratitud y de satisfacción.

Para aquellos que ya hacen todo esto, los felicito de corazón! 

Vivan con intención, 

Chris Palasz.

Soy libre de mis pensamientos.  Me enfoco en asociar el placer a todo lo que deseo en mi vida. Mi identidad es mi núcleo. Mi estado es mi herramienta más valiosa. El poder de decisión y de transformación me pertenece a mí.” 

Si esto les ayudó, sirvió, despertó algo en ustedes, iluminó o simplemente les gustó, les pediría me sigan en FB: @higherintent y mi blog #inmysauce. Cualquier comentario o pregunta: chris@higherintentcoaching.com

Estoy aquí para servirles!